Pictures: 03.VI.2003, 17.VIII.2011
Description | History |
Troncedo runs a blog (Nos vemos en Troncedo) and on December the 6th of 2010 the entry was devoted entirely to the mill. They reran a story which was first published in the local annual el Caixigo nº 2 in 2005. Emeterio Villar (of casa Tejedor) tells the story of the mill and his youth. It's most interesting and I therefore bring a translation. Some of the Aragonese withstood all my efforts; my apologies.
Tradicionalmente en Troncedo se había producido aceite para el consumo. El año que había cosecha, se guardaba en el granero o en la bodega en tinajas de barro o pilas de piedra junto con los jamones, las conservas y el trigo. Estas estancias se cerraban con llave para que no entrara ningún ratón, ni de cuatro patas "ni de dos". Si un año sobraba aceite se dejaba en la tinaja para el siguiente y se juntaba con el nuevo. Si era un poco fuerte, duraba más pues se ponía menos cantidad en los guisos. ¡Entonces no existía la fecha de caducidad!
Cuando había apuros para pagar la contribución o comprar algo para las fiestas de San Lorenzo o Navidad se vendían algunos litros, dependiento de la cantidad que se disponía. ¿Quién compraba si nadie tenía dinero por aquel entonces?
El Sr. Emilio Rami Espuña de casa Joaquín compraba el que le vendían en Troncedo, completaba carga en Salinas y Trillo y, tras envasarlo en "boticos" de piel de cabra lo llevaba a vender a la montaña, bajándose a su regreso patatas para sembrar llamadas cuarentenas blancas, muy buenas.
Volvamos al oro líquido —las olivas—. Las mejores se criaban en San Quílez, Las Cuastas, Las Cabaniellas, El Pocino, El Redolón, La Coma, Los Mayuales, La Oliva, El Olivarón, ... (todos términos del lugar). Después de la recogida se llevaba a moler a Formigales, Trillo o Palo.
En aquellos años llovía y nevaba mucho más que ahora. Cuando la nieve cubría las entradas de las casas lo primero que había que hacer por la mañana era "traña" (camino con la pala) para ir a los corrales, faenas, ...
Traditionally the oil produced in Troncedo was for human consumption. In the year that there was a harvest the oil was put in earthen jars or stacks from stone and kept in a barn or in the cellar next to the hams, preserves and wheat. These places were locked with a key in order to keep out any mice (whether with four or only two legs). Oil left over from a previous year, was mixed with fresh oil from the new harvest and if the resulting taste was a trifle too strong one simply did longer with less. Those were the times before the invention of expiration dates!
Sometimes when it was difficult to make ends meet (taxes to pay, or something to buy for the fiestas de San Lorenzo or for Christmas) and if there was a small amount that could be missed some litres of oil were sold. But back then when almost nobody had any money it wasn't always straightforward.
Mr. Emilio Rami Espuña of casa Joaquín bought the oil presented for sale in Troncedo, got some more in Salinas and in Trillo, put the lot in sacks made of goatskin and went then to the mountains in order to sell. Later on he came back with excellent plant potatoes, called cuarentenas blancas.
Let's get back to the liquid gold — the olives. The best produce was grown in San Quílez, Las Cuastas, Las Cabaniellas, El Pocino, El Redolón, La Coma, Los Mayuales, La Oliva, El Olivarón (all are places belonging to Troncedo). The harvest was carried to Formigales, Trillo or Palo to be processed.
In those years there was much more rain and snow than nowadays. When snow blocked the doorways our first chore in the morning was to clear the paths with a spade so we could get at our pens.
Person | of house |
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Joaquin Senz | Torretas |
Silvestre Clusa | Perera |
Antonio Solano | Salas |
Francisco Lanau | Pascual |
José Fumanal | Solanilla |
Vicente Torres | Torrocella |
Emilio Rami | Joaquín |
Florencio Plana | Sarrat |
Emeterio Villar | Tejedor |
Agustin Castan | Viu |
Las piedras para su construcción se arrancaron de la misma faja. Todavía tengo en mi memoria a mi tío Agustín Castán Carrera, socio fuerte, golpeando las piedras recias con la maza que conservo como recuerdo.
Muchas maderas de las utilizadas son de chopo de Las Espulgas de Viu, cuando se desemboscaban se espaldó la mula "guita", ¡pegaba unas coces qye bi veas!, era pequeña pero más fuerte que el acero. Por suerte no le pasó nada pero el susto fue gordo.
Las losas del tejado se arrancaron en Sanchús de Blan, en el Chuñán de Sarrat y en Cochartiga, junto al camino de bajada a Las Comas, donde se daba sal a las ovejas. Las transportaban una reata de animales con los ganchos de carga. Las "leras", que eran las losas más grandes, eran utilizadas para las esquinas y la parte inferior del tejado.
Las puertas y las ventanas las hizo el Sr. José Cabrero, el carpintero de Formigales con maderas de los pinos que serrábamos en los pinares. De esas maderas obteníamos también las "latas" o "barderas" que se utilizaron en el tejado para sujetar las losas. Como argamasa se utilizaba el barro blanco o "buro", el cemento iba con cuentagotas.
Recuerdo con nostalgia los trabajos para su construcción. Yo era el pinche de la cuadrilla, tenía quince años (1952) y ¡tanta ilusión por delante! Aún resuena en mis oídos: "Zagal, aparta ixa tierra", "Acerca el botejón", "¡Trai-e la bota vino!", ...
El mecanismo de prensa (los usillos y el cabezal) se compraron en casa Pascau de Enate y la piedra de moler en Montearnero — cerca de El Grado —. Todo ello fue transportado en la camioneta de Rito, el maestro de Trillo. Para coordinar los trabajos decíamos: "¡imos de junta!" y la reunión se hacía en casa del alcalde —Casa Solanilla—. Como estaba en el medio del pueblo a todos nos iba bien. No faltaba el secretario, Florencio Plan Gracia de casa Sarrat. Los socios o casas eran: Viu, Tejedor, Sarrat, Joaquín, Torrocella, Solanilla, Pascual, Salas, Perera y Torretas.
En el año 1952 se terminó y se puso en funcionamiento. Al segundo pie que se hizo se rompió la bancada y se agrietaron las pilas. Se tuvo que rehacer de nuevo. Se puso un tronco de roble abajo para que, al apretar, subiera la bancada. Esto tronco lo subieron de Garbiés de Torrocella. La idea fue del Sr. Emilio de Casa Joaquín y funcionó.
El 5 de enero de 1953 se reinauguró, llevando cada socio dos anegas de olivas. Todavía me acuerdo del pan tostado untado con el primer aceite con azúcar y del vino de la bota. Todos felices nos retiramos de madrugada a descansar la noche de Reyes, más contentos que un chico con zapatos neuvos.
Pero poco duró la alegría, a la mañana siguiente, la Sra. Emilia Salinas nos despertó en el barrio de San Angel: "¡Emilio ha muerto!" gritaba desesperada. ¡Vaya día de Reyes que pasamos todo el pueblo!
Tantos esfuerzos e ilusiones invertidas duraron sólo 11 años. En febrero de 1964 se produjo una helada que mató prácticamente todas las oliveras del pueblo. Se quedaron sin hojas y la corteza se arrancaba como la piel de una culebra. Las que fueron bribadas a lo bruto volvieron a brotar algo pero la ilusión ya desapareció.
¡Pobres antepasados!, con las paredes que tuvieron que hacer de muchos metros de altura para poner una olivera en un espacio que no entraba el par de mulas para labrar. ¡Qué lástima de oliveras, árboles centenarios dignos de ver y cointemplar y que jamás se podrán recuperar! ¡Con qué mimo y esfuerzo se trabajaron para que dieran las olivas y de ellas extraer el precioso oro líquido. ¡Ahora todo perdido!
Stones for its construction were pulled from the same strip. I still remember seeing my uncle Agustín Castán Carrera, a very strong man, working the migthy stones with a hammer that I've kept as a keepsake.
Most of the wood used was of poplar taken from Las Espulgas of Viu. During the operation the mule fell and she reacted very skittish. She wasn't big but strong as steel. Luckily nothing serious happened but it caused quite some fright.
The losas (flat stones) for the roof were collected in Sanchús de Blan in Chuñán de Sarrat and in Cochartiga, next to the road leading down to Las Comas, where salt was given to the sheep. The stones were carried by a line of animals with load hooks. The biggest plates, named leras, were used on the corners and the lower part of the roof.
The doors and windows were made by Mr. José Cabrero, carpenter in Formigales, out of wood from trees we saw in the pine forests. The same timber provided also the latas or barderas which were used to fasten the stones on the roof. White mud or buro was used as mortar and cement was only added in very small amounts.
It is with nostalgia that I look back at the construction work. Being only 15 years old (1952), I was the drudge of the team. But how exciting it was. I can still hear it ring in my ears: Zagal, remove this earth. Hand over the botejón. Pass me the bota with wine!
The press (the screws and the head) were bought from casa Pascau in Enate. The stone came from Montearnero — near El Grado. The lot was transported with the van of Rito who was the schoolmaster in Trillo. In order to organize the work we said Let's come together! and then a meeting was organized in Casa Solanilla — the house of the mayor. It was situated in the village center and that was very convenient for everybody. The secretary Florencio Plan Gracia of casa Sarrat was present, just like the other partners (or houses) named: Viu, Tejedor, Sarrat, Joaquín, Torrocella, Solanilla, Pascual, Salas, Perera and Torretas.
The work was finalized in 1952 and the mill was put into operation. It was no later than during the second batch that the bench on which the press was mounted collapsed and damaged the containers. Repairs were needed. An oak was found and put below the bench in order to conteract the pressure on the bench. The trunk came from Garbiés of [casa] Torrocella. The suggestion mas made by Mr. Emilio of casa Joaquín and it worked.
The second inauguration took place on January 5th of 1953 with each partner bringing the amount of two anegas of olives. I do still remember the toasted bread covered with the first olive oil and sugar and the wine from the bota. We were happier than a child with a new pair of shoes and it was already early morning before we retired in order to recuperate from the night of Reyes (Epiphany).
Our joy was short-lived because the next morning Ms Emilia Salinas woke us up with a hopeless cry Emilio is dead. That was quite a memorable Epiphany for the whole village!
We had worked so hard and lived so many hopes but it only lasted 11 years. February 1964 brougth a frost who killed almost all the olive trees of the village. They lost their leaves and the bark came loose like a snake's skin. Those who were severely cut back did form some new sprouts but the end was near.
Poor ancestors. They had built walls, many meters high in order to protect the trees and keep the mules from destroying them. How sad for the olive trees, proud trees hunderds of years old and now gone. How much care and energy was spend in order to harvest olives and then extract the precious liquid gold. And now it was all lost. Forever!